Hoy, con el dolor, llega el fantasma de tu voz, diciéndome, ya no llores amor. Soy, un eslabón, que se ha perdido entre tu y yo. Por favor, sólo llévate el silencio que quedó. Fui, fuego por ti, hoy sólo quedan las cenizas, los restos de mí. Fui, todo y sin ti, desaparezco poco a poco y me perdí, dentro de mí.
" Se puede ser feliz después de las lágrimas, renacer después de un mal momento, y perdonar después de las heridas "